Esta propuesta consiste en una inmensa forma orgánica ondulada cuyo nervio central apoya en el suelo sobre dos únicos puntos. Su trazado permite diversas posiciones en planta, en solitario o combinadas entre sí. En función del punto de vista del peatón, las suaves curvas de su cubierta transmitirán distintas sensaciones visuales, todas de fuerte inspiración orgánica y vegetal. La estructura portante emula el grueso tallo de una hoja gigante, o quizás la cola de algún animal marino en el momento de sumergirse.

El programa de Sombras Onduladas está pensado para cubrir grandes espacios públicos con el mínimo de puntos de apoyo, gracias a los 75 m2 de la superficie de cubierta de cada pórtico y los 12 metros de arcada entre cada base.

Se trata de una excelente solución para paradas de autobús, zonas de descanso en paseos marítimos, parkings o céntricas plazas urbanas donde se quiera aportar un valor añadido de gran belleza formal.